lunes, 9 de abril de 2012

Represión en Macuspana


Por Fernando Vázquez Rosas

(Publicado en La Verdad del Sureste, el lunes 9 de abril de 2012)

Algo muy grave debe estar sucediendo en Tabasco como para que unos estudiantes sospechen que el director de su escuela comete actos de corrupción que afectan el desarrollo de su plantel.

Algo todavía más grave debe estar ocurriendo como para que esos mismos estudiantes (de buen promedio, por cierto) decidan dejar las aulas e iniciar una protesta pública, con huelga de hambre incluida, exigiendo una auditoría.

Pero de mucha mayor gravedad debe ser la realidad de este asunto como para que, de madrugada, otros supuestos estudiantes lleguen con palos y navajas a tratar de recuperar el plantel y tras de ellos los antimotines que a golpes y detenciones desactivaron la protesta pacífica de quienes exigían cuentas claras de su director.

Se trata de la exigencia de una rendición de cuentas convertida en represión policiaca. Es el derecho a la libre manifestación transformado en sometimiento con violencia. Estamos ante la pérdida de la civilidad, ante el agotamiento de los cauces institucionales.

Habrá quien diga que los estudiantes están para estudiar y no tenían por qué andar en manifestaciones ni en huelgas de hambre. Habrá quien proclame que una institución educativa no tenía por qué estar detenida a causa de unos cuantos. Otros seguramente justificarán que para eso está la fuerza pública, para poner orden, les guste o no les guste.

Pero hay que insistir en el origen del movimiento estudiantil del Tecnológico de Macuspana: ¿No era más fácil que el director rindiera cuentas claras? ¿No era más sencillo que se hicieran una, dos, tres auditorías y las que fueran necesarias? ¿Por qué tanta resistencia a responder el reclamo de los jóvenes si, como se asegura oficialmente, no hay nada que ocultar?

Parece que en el Tecnológico de Macuspana quieren jóvenes dóciles. Que estudien, sí, pero que no piensen. Como que a las autoridades de aquel plantel les molesta que sus alumnos tengan una visión crítica.

La negativa a rendir cuentas por parte del director Enrique Bellizzia Rosique, que concluyó en un acto de represión, sólo exhibe un menosprecio por los estudiantes en particular y por los ciudadanos en general, herencia del comportamiento del gobernador del estado.

Si Andrés Granier y todo su gobierno hacen todo por privilegiar la opacidad, pues Enrique Bellizzia no iba a ser la excepción, sobre todo sabiendo que cuenta con respaldo político: su hermano Pascual Bellizzia Rosique es diputado local por el Partico Verde y su primo Nicolás Bellizzia Aboaf es diputado federal por el PRI.

El propio Enrique Bellizzia fue nombrado director del Tecnológico de Macuspana por el gobernador Andrés Granier, pues la ley respectiva indica que el mandatario estatal decide quién será titular a partir de una terna que proponga la Junta de Gobierno de esa institución.

El Instituto Tecnológico Superior de Macuspana fue creado por Acuerdo firmado el 25 de mayo de 2000 entre el entonces gobernador Roberto Madrazo Pintado, el titular de la SEP Miguel Limón Rojas y la secretaria de Educación estatal, Graciela Trujillo de Cobo.

Cada año esa institución recibe un presupuesto que aprueba el Congreso del Estado dentro del paquete fiscal estatal. Para este 2012, por ejemplo, el Tecnológico de Macuspana tiene autorizado ejercer 45 millones 869 mil 974 pesos, de los cuales 21 millones 174 mil 516 son Ingresos Fiscales Ordinarios y los otros 24 millones 695 mil 458 pesos son de convenios federales.

Pero el director Enrique Bellizzia siempre ejerce más recursos porque el Tecnológico de Macuspana ha firmado convenios con Pemex, específicamente con Pemex Exploración y Producción (PEP), que genera ingresos millonarios a la institución.

Por citar unos casos, el primero de diciembre de 2010 PEP le pagó al Tecnológico de Macuspana 7.4 millones de pesos por concepto de “ingeniería para la construcción de batería modular costero”.

El 10 de enero de 2011 PEP pagó a la misma institución 824 mil pesos por la “elaboración y actualización de As-built de las instalaciones del activo integral Macuspana”. 

El 4 de mayo de 2011 PEP pagó al Tecnológico de Macuspana un millón 156 mil pesos nuevamente por la “ingeniería para la construcción de batería modular costero”. Y por ese mismo concepto hay registro de otros dos pagos más: un millón 209 mil pesos el 10 de mayo de 2011 y 3 millones 533 mil pesos el 11 de julio de 2011.

Javier Herrera Escamilla, el académico que dedica gran parte de su tiempo a la investigación mediante solicitudes de acceso a la información, tiene todas las facturas de estos pagos.

Él mismo tiene documentado que el Tecnológico de Macuspana tuvo ingresos propios por 61 millones 982 mil 449 pesos en 2008, 16 millones 780 mil 677 pesos en 2009 (año electoral) y 5 millones 888 mil 230 pesos en 2010. Y de todo esto, según el investigador Javier Herrera, la rendición de cuentas es siempre escasa.

Por algo Enrique Bellizzia se negó en todo momento a cumplir la petición de los estudiantes, por algo no ha querido rendir cuentas, por algo se atiene al discurso oficial de que ya todo lo evaluó el Órgano Superior de Fiscalización que, como es sabido, desvía la mirada a conveniencia política.

En efecto: Algo muy grave debe estar sucediendo en Tabasco como para que una exigencia de rendición de cuentas sea acallada con porros y antimotines.

fernandovazquezr@gmail.com
@fer_vazquezr
“Es tiempo de hablar” (Martes, 9pm, Canal 10 Cablecom)

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